ALERTA MAXIMA ¿su empresa está preparada para gestionar la crisis?
Cuando leemos las cifras económicas espeluznantes de los últimos días seguro que todos piensan en su situación empresarial y personal. Es humano y razonable tener sensaciones negativas, pues no hay casi ningún dato que aventure una salida rápida de una crisis global. Salvo el de algún bienaventurado político. Los números son tozudos y recuperaciones fulgurantes quedan a priori fuera de toda lógica.
Ayer dirigí un Consejo de Dirección que inicié con unos videos cortos de altos directivos comerciales de la gran Distribución (Corte Inglés, Consum, etc.) y también de algunas de sus empresas proveedoras líderes en diferentes categorías (Coca-Cola, Henkel, Pescanova etc). Ilustraban tendencias de los “nuevos consumidores” creados a partir del confinamiento y que han venido para quedarse. Ventas por internet y sobre todo, atención, volvemos al consumidor low cost. Decrecimiento de la propensión marginal al consumo dadas las abultadas cifras de paro previstas.
La empresa en cuestión tiene dos factores que aportan tranquilidad:
- Está relacionada con el sector agroalimentario, de los pocos que ha crecido durante la pandemia.
- Sus finanzas estan muy saneadas con un apalancamiento financiero prácticamente a 0 con capacidad para resistir un año sin ventas durante el que podría mantener a toda la plantilla actual y los gastos de estructura.
¿Y yo cómo lo estoy haciendo? probablemente se hará esta pregunta continuamente dada la situación. Seguro que ya está tomando decisiones drásticas para mejorar su situación, pero lo que seguro que tiene que hacer son aquellos deberes que correspondería en algunos casos haber hecho antes y quizá ha ido posponiendo. No es mi propósito asustar pero la coyuntura actual es muy complicada y es evidente que el sistema más efectivo para que las personas reaccionemos es el miedo. No para paralizarnos pero sí para actuar de forma rápida y diligente. Ahora veremos la madera de los directivos, de las generaciones que han de asumir las batutas de mando en las compañías con capacidad en algunos casos muy limitada, de unos equipos de venta que han de salir “a muerte” al mercado y del rey que es el director financiero para la gestión del Cash. (Cash is King o Queen)
En estas situaciones de tensión hay que ordenar, planificar y tomar decisiones. Mi función es la de equilibrar situaciones entre empresa y familia empresaria con los stakeholders. Ahora es cuando hay que abordar un plan estratégico de contingencia, gestionar la crisis, conocer de verdad a nuestros colaboradores y decir la verdad. Para eso me contratan.
No olviden una de mis frases favoritas: Cuando el dinero sale por la puerta el amor se va por la ventana.
Los que hagan vacaciones disfrútenlas, la vuelta será complicada. Feliz Verano.